El Horóscopo de hoy
Miguel Ángel Méndez Rojas
No lo niegues, querido lector. Esta mañana mientras te preparabas para el trabajo, en la radio una locutora (a quien a falta de imagen siempre asocias con una pelirroja que fue tu compañera en la universidad y que te traía cacheteando las banquetas) leía con su rasposa y sensual voz el “Horóscopo de Hoy”, y (mira lo que son las casualidades) era el tuyo: “Libra: Hoy debes dejar que tu cuerpo se agite, sacar con el estremecimiento tantas cosas que llevas dentro que te agobian. Tu pareja te hará sentir descorazonado. Querrás estar solo, pero tus amigos querrán convencerte de lo contrario. Puede ser un día deprimente, pero no es tu culpa, son los astros que se han confabulado para que te sientas así. Por ningún motivo pases la línea amarilla en la estación del Metro.”. Apuraste el licuado, te enderezaste la corbata, tomaste las llaves del auto y te encaminaste al trabajo. Pensaste, “¡Qué tontería!”, si yo ni tomo el metro, ni tengo pareja, ni tengo amigos…”. Luego entonces, te deprimiste con esos pensamientos de tu amarga soledad; algunas lágrimas asomaron por tus ojos y, mientras buscabas un pañuelo para limpiarte la nariz, desviaste la mirada del camino. Bastaron apenas unos segundos para que tu auto rebasara la línea amarilla que marca el carril restringido del Metrobus, que venía acelerado para dar vuelta en la prolongación de la Diagonal Defensores de la República, rumbo a la estación de transferencia y te impactara ligeramente, haciéndote virar repentinamente para evitar que te arrastrara en su marcha. ¿Coincidencias? No. Los astros, como dijo en tu mente la pelirroja, se habían confabulado en tu contra ese día.
En los inicios de la civilización, la observación de los astros permitió a la humanidad encontrar interesantes correlaciones que fueron útiles para marcar el inicio de las estaciones, las épocas de sembrar, cosechar y para la elaboración de complejos y muy precisos calendarios, basados en el movimiento de las estrellas. Probablemente, como una medida de simplificación y asociación de alguna de esos astros en el vasto espacio nocturno, un aburrido antepasado empezó a verles formas y comenzó a bautizarlas de acuerdo a su apariencia. Así nacieron las constelaciones de la Osa Mayor, Casiopea, Orión, entre otras. Obviamente, los nombres estaban relacionados a la mitología de la sociedad que las nombraba. Así, mientras para unos un conjunto de estrellas tenía forma de cucharón y lo nombraban así “Cuchara”, para otros era una osa, para otros un dragón y algunos más verían ahí uno de los tantos brazos de Budha. De los nombres que hoy conocemos, casi la mitad provienen de la imaginación de los antiguos griegos, aunque un conjunto muy particular se originó en la antigua Babilonia durante el reinado de Nabucodonosor II en el siglo VI a.C.: el Zodiaco, que aunque originado con otros nombres, finalmente también fue adaptado por los griegos para ajustarse a las 12 constelaciones que hoy conocemos: Acuario, Piscis, Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpión, Sagitario y Capricornio. Aunque podríamos decir que, en ese sentido, el su origen la Astrología es una especie de proto-Astronomía, la premisa sobre la que se basa (que los fenómenos astronómicos pueden influir en los rasgos de la personalidad de los individuos y en los sucesos importantes de su vida o en acontecimientos mundiales como crisis económicas o el resultado del mundial de futbol) es sin duda, una falacia. Para mayores detalles al respecto, remitiría al lector interesado a un fascinante texto de divulgación que escribió mi colega Raúl Mujica, astrónomo (no astrologo) del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica, hace casi dos años: http://www.saberesyciencias.com.mx/sitio/articulos/113-los-astros-se-han-conjugado-para-hacerte-una-mala-jugada.
Como no es mi intención echar más ácido en un tema que, por sí mismo es claramente pseudociencia, aprovecharé este espacio para escribir, de una forma científicamente elaborada, las predicciones que los astros marcan para cada signo del Zodiaco esta semana y la próxima (6 en esta ocasión, otros 6 en la siguiente). Así que, por favor, no salga de casa sin leer lo que le depara su signo. No vaya a ser que en una de esas le atine (existe, claro, siempre una probabilidad de que así sea) y usted no tome esta oportunidad que el destino me ha dado de prevenirle ante una desgracia (o fortuna) en su camino.
ARIES (Ovis orientalis): Votar en rebaño está en tu ADN (ácido desoxirribonucleico). Solo asegúrate en que el monedero electrónico no esté caduco, lo mismo que el jamón de la torta. El músculo ventricular de la bomba cardiaca ubicada en el mediastino medio, se contraerá y excitará alternadamente por tu cónyuge, por lo que la oxigenación a la región frontal cerebral y tu relación de pareja mejorarán. Ese romanticismo que sientes en forma de mariposas en el estómago, no es otra cosa más que una amibiasis: desparasítate. En el trabajo deberás evitar protagonismos, para que así no te asignen responsabilidades más duras y complicadas. Recuerda: “Clavo que sobresale, lo encuentra el martillo”. Puedes tener miedo respecto a las enfermedades, aunque en el fondo eres un hipocondríaco. Te sientes débil físicamente y quisieras no levantarte de cama, pero no te obsesiones con el tema: la probabilidad de morir mientras uno duerme al caer de la cama es de 1 entre 4,473 (0.000223%).
TAURO (Bos primigenius): En el terreno amoroso vivirás un momento dulce. En específico, las papilas gustativas localizadas en la punta de tu lengua serán capaces de detectar fitosacáridos naturales que activarán una cascada de neurotransmisores, producto de esa interacción sensorial entre una palanqueta y tu hambre. Lamentablemente esto también ha mandado señales equívocas a tu de por sí maltratado páncreas, lo que ha generado una súbita secreción de insulina para manejar el exceso de glucosa en tu sangre. El día de hoy ha iniciado formalmente tu síndrome metabólico: ¡Bienvenida a la Diabetes! Tus relaciones con los demás son armoniosas, en particular con aquellos con influencia de Venus, planeta cuya atmósfera compuesta por dióxido de azufre, nitrógeno y dióxido de carbono y con una temperatura media de 463 °C, es más cercano al infierno de Dante que a un lugar placentero. En el trabajo, es posible que consigas nuevos clientes o socios. O no. La probabilidad es la misma que obtendrías mediante la permutación de poner de formas distintas un diente de ajo en 5 distintos recipientes. Puedes sufrir de acidez estomacal, pero esto no tiene sentido pues el pH estomacal es cercano a 2.0, lo que es suficientemente ácido como para disolver un diente de leche en 2 días. Si no controlas tu dieta, en particular tu afición a los refrescos de cola (aunque sean de dieta), terminarás con úlceras y, definitivamente, diabetes.
GÉMINIS: Te invadirá un sentimiento de hacer algo espontáneo. Esa esquizofrenia paranoide que no han controlado está empezando a hacer estragos en tu vida: además de las voces y alucinaciones, estás convencida de que alguien te sigue a todas partes. Seguramente querrás tomar un camino a casa diferente para evitar que te encuentren. Ten a mano el pasaporte y la visa, compra un boleto de avión a cualquier parte. Desaparece un par de semanas. Aprovecha para conocer esos lugares a donde siempre quisiste ir. Por ejemplo, ese viejo y abandonado laboratorio en las afueras de la ciudad, cuya dirección extrañamente está en tu certificado de nacimiento. Hoy te lloverían ofertas de trabajo interesantes, pero desafortunadamente decidiste abandonar hoy tu empleo para indagar en el misterio de tu pasado. Tienes una energía desbordante que te hace hiperactivo. No te sorprendas mucho, al abrir la puerta al final del pasillo oscuro del Área de Experimentos Genéticos, de encontrarte, no con un extraño, sino contigo mismo. Un poco más pálido y desaliñado, pero tú: comiendo cabezas de pescado de un sucio plato. Tu número de la suerte: el dos.
CÁNCER (Callinectes sapidus): Hoy tu autoestima estará en su punto más alto. Te sentirás atraído por alguien a quien nunca antes habías prestado atención. Esas descargas eléctricas en tu corteza cerebral, que nacen de la vista inicial, se trasladan a una respuesta fisiológica en el sistema endócrino, activada por la segregación de dopamina en el hipotálamo. Tus manos tiemblan, sudas como en sauna, tartamudeas y sonríes estúpidamente al aire. Pierdes el apetito (por la dopamina), te sientes cargado de energía y claro de mente (por la feniletilamina). La norepinefrina y oxitocina en tu organismo te hacen pasar horas coqueteando con la causa de esta cascada bioquímica. En lo laboral, te despedirán debido a que, por causa de tu enamoramiento, una prensa mecánica se desconfiguró y casi le arranca un brazo a un compañero de trabajo. Súbitamente piensas que, lo tuyo lo tuyo, no es el trabajo en planta sino la aventura de comprender la complejidad del ser humano. Tu salud es inmejorable, pero tu ánimo decaerá en dos semanas, cuando la cascada de reacciones bioquímicas se detenga y tu actividad neurológica se normalice. Entonces te darás cuenta de que, ni la querías tanto, ni valía la pena perder el empleo por ello. Tu color de la suerte es el bermellón.
LEO (Panthera leo): En tu relación de pareja, eres un tigre (bueno, un león). Pero te invadirán los celos, la inseguridad, a lo largo del día, lo que te provocará un gran malestar emocional. No deberías obsesionarte, pero tu mente te convence de que algo malo está pasando entre ustedes dos. Tomas un taxi para que te lleve a donde vive la causa de tus pesares. Si supieras que tus celos se deben a una baja concentración de serotonina en tu sangre, todo sería distinto. Nada te detendrá: ella debe amarte a ti y a nadie más. Entras sigilosamente a su departamento, mientras ella aun duerme. Cambias su bolsita de té de manzanilla por otra de Tolohuaxihuitl o Toloache (Datura inoxia) y esperas hasta que esté lista la infusión. Miras tu reloj y te das cuenta de que ya es tarde para ir al trabajo. Llamas por teléfono a tu jefe para disculparte; pretenderás una gripa mal cuidada. Mientras caminas rumbo a la recámara de tu novia, te sorprende escuchar un teléfono celular sonar, mientras que tu esperas que tu jefe te conteste. Cuando abres la puerta, tu mirada de sorpresa y desilusión se combina con un tosco “Hola” de tu jefe, que está frente a ti, semidesnudo, con ella. Sabías que tenías ascendencia con Tauro, pero esto es ridículo. En lo laboral, hay buenas probabilidades de que obtengas un aumento (o te despidan). Olvida la dieta, tus niveles de colesterol son normales, de otra forma, un infarto te habría terminado hace un momento. Tu número de la suerte, no es el de tu celular en este momento.
VIRGO: Tus niveles de afecto hoy son muy altos y serás cariñosa con los que te rodean. Ellos te van a agradecer mucho tus muestras de afecto. En el trabajo, hoy será un buen día para mostrar tus conocimientos, así que aprovecha tus cualidades para convencer al jefe de que mereces ese ascenso. No en balde esos últimos 8 años de posgrados y especializaciones en biotecnología de alimentos deberán surtir efecto. Puedes llegar a ser una gran líder hoy, ya que del análisis del mercado podrás deducir las debilidades de tu competencia y analizar a largo plazo las situaciones del mercado y anticiparte a los problemas. En la cafetería te sientas con el hijo del jefe, ese inútil que no lleva los últimos 10 años estudiando la licenciatura y que no tiene para cuándo terminar. Le explicas tus ideas; te mira admirado, convencido de que con tus ideas la compañía se ahorrará millones de dólares en el proceso de producción y conquistará nuevos mercados que la llevarán a una nueva época de abundancia. Tú regresas a tu micro-cubículo, pensando que tienes el puesto directivo vacante en la bolsa. Mientras escribes un correo electrónico para pedir una cita a tu jefe, recibes un memorándum indicando que el nuevo Director General de la compañía es (yasabesquien) el hijo del jefe. De manera breve, el comunicado indica que “con ideas frescas, innovadoras y atrevidas, el Lic. Manzanares (y bien sabes que ni eso es cierto) llevará a la compañía hacia el siglo XXI. En tu salud, debes ir con cuidado. Tus emociones te hacen sentir enferma. Evita el café y otras bebidas astringentes.
Nota final: Y tal vez te parezca ridículo que alguien, en pleno siglo XX crea en los horóscopos y la astrología. Pero, ¡vamos! Hay gente que confía su vida en la medicina homeopática, que detiene el uso de medicina occidental moderna en sus seres queridos con cáncer u alguna otra enfermedad, y que solo cuando se encuentran en situaciones extremas (y lamentablemente incurables) los lleva a un hospital para, inevitablemente, verlos morir. Y lo peor, luego demanda al hospital y a los médicos que trataron de hacer el milagro de salvar a alguien prácticamente muerto antes de llegar al lugar, por los malos manejos y cuidados de los familiares, por “negligencia médica”. Sí, yo también apoyo a los médicos injustamente inculpados en Jalisco. Que se haga justicia. #yosoy17